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El presidente francés, Nicolas Sarkozy, prometió el miércoles salvar una fábrica del grupo industrial estadounidense Caterpillar, un día después de que los trabajadores detuvieran a cuatro gerentes durante 24 horas enojados por un plan de despidos.
Fuentes sindicales dijeron que los gerentes fueron liberados el miércoles al mediodía, después de pasar la noche encerrados en la planta de la ciudad de Grenoble, en los Alpes franceses.
Caterpillar, el mayor fabricante del mundo de equipamiento para la construcción y la minería, planea recortar empleos en varios países y un funcionario sindical dijo que 733 de los 2.700 trabajadores de la planta de Grenoble perderían sus empleos.
"Salvaré esta instalación", dijo Sarkozy a radio Europe 1 en una entrevista realizada el miércoles por la mañana.
No estaba claro exactamente qué quiso decir el mandatario debido a que las instalaciones no estaban amenazadas por un cierre.
"Me reuniré con este comité sindical, ya que me han convocado para el rescate. No los abandonaré", dijo refiriéndose a los representantes sindicales del personal de Caterpillar.
El nivel de aceptación del presidente francés cayó al 36 por ciento según un sondeo publicado el martes, principalmente debido a la percepción de que no está haciendo lo suficiente para ayudar a los trabajadores que sufren los efectos de la crisis.
Frente al cierre de instalaciones y despidos, los trabajadores franceses están optando por encerrara a los gerentes para asegurarse mejores términos.
Los trabajadores de la planta de Caterpillar encerraron el martes al director, al titular de recursos humanos y a otros dos gerentes en una oficina, con la intención de forzarlos a volver a las negociaciones sobre los términos de las indemnizaciones, dijo un funcionario sindical.
El mes pasado, el titular de Sony France fue encerrado en una oficina durante toda la noche, mientras que furiosos trabajadores que enfrentan despidos bloquearon el martes el paso de un taxi en el que viajaba el multimillonario Francois-Henri Pinaultm, antes que la policía antimotines fuera llamada para despejarlos.
En una entrevista radial, Sarkozy también criticó al fabricante alemán de partes de autos Continental por sus planes de recortes en una planta de fabricación de neumáticos en Clairoix, al norte de Francia, que emplea a 1.120 trabajadores.
El mes pasado, los gerentes fueron agredidos con huevos por el personal enfurecido.
Fuente: Reuters (Reporte de Francois Murphy y Clement Dossin; Editado en español por César Illiano)
Fuentes sindicales dijeron que los gerentes fueron liberados el miércoles al mediodía, después de pasar la noche encerrados en la planta de la ciudad de Grenoble, en los Alpes franceses.
Caterpillar, el mayor fabricante del mundo de equipamiento para la construcción y la minería, planea recortar empleos en varios países y un funcionario sindical dijo que 733 de los 2.700 trabajadores de la planta de Grenoble perderían sus empleos.
"Salvaré esta instalación", dijo Sarkozy a radio Europe 1 en una entrevista realizada el miércoles por la mañana.
No estaba claro exactamente qué quiso decir el mandatario debido a que las instalaciones no estaban amenazadas por un cierre.
"Me reuniré con este comité sindical, ya que me han convocado para el rescate. No los abandonaré", dijo refiriéndose a los representantes sindicales del personal de Caterpillar.
El nivel de aceptación del presidente francés cayó al 36 por ciento según un sondeo publicado el martes, principalmente debido a la percepción de que no está haciendo lo suficiente para ayudar a los trabajadores que sufren los efectos de la crisis.
Frente al cierre de instalaciones y despidos, los trabajadores franceses están optando por encerrara a los gerentes para asegurarse mejores términos.
Los trabajadores de la planta de Caterpillar encerraron el martes al director, al titular de recursos humanos y a otros dos gerentes en una oficina, con la intención de forzarlos a volver a las negociaciones sobre los términos de las indemnizaciones, dijo un funcionario sindical.
El mes pasado, el titular de Sony France fue encerrado en una oficina durante toda la noche, mientras que furiosos trabajadores que enfrentan despidos bloquearon el martes el paso de un taxi en el que viajaba el multimillonario Francois-Henri Pinaultm, antes que la policía antimotines fuera llamada para despejarlos.
En una entrevista radial, Sarkozy también criticó al fabricante alemán de partes de autos Continental por sus planes de recortes en una planta de fabricación de neumáticos en Clairoix, al norte de Francia, que emplea a 1.120 trabajadores.
El mes pasado, los gerentes fueron agredidos con huevos por el personal enfurecido.
Fuente: Reuters (Reporte de Francois Murphy y Clement Dossin; Editado en español por César Illiano)
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